Madera contralaminada y vidrio componen la envolvente de una residencia de estudiantes Passivhaus en Australia

La construcción Passivhaus es relativamente nueva en Australia. Aún hay pocos proyectos en comparación con  los países europeos. Estudios de arquitectura como Jackson Clements Burrows Architects (JCBA) están trabajando para sentar las nuevas bases del panorama arquitectónico de Australia. Una de sus obras finalizadas en febrero de 2019 es la residencia de estudiantes Gillies Hall, situada en el campus Peninsula de la Universidad de Monash en Frankston, a las afueras de Melbourne.


El edificio está distribuida en seis plantas y tiene una superficie bruta construida de 6500 metros cuadrados. En la actualidad, se trata del edificio Passivhaus más grande que cuenta con una estructura de paneles de madera contralaminada CLT , no solo en Australia, sino en todo el hemisferio sur. Los elementos de vidrio de la envolvente del edificio, suministrados por Saint-Gobain Glassolutions, están equipados con perfiles intercalarios de borde caliente SWISSPACER ULTIMATE.

Con este proyecto, los arquitectos ayudan a la universidad a alcanzar su objetivo de generar cero emisiones netas de carbono para el año 2030. La demanda de calefacción certificada del edificio es de 5 kWh/m²a; de manera que el valor alcanzado es de alrededor un 70 u 80 por ciento inferior al de un edificio equivalente de construcción tradicional en Australia. Según la información proporcionada por los ingenieros de Grün Consulting, empresa encargada de otorgar la certificación Passivhaus, la demanda de energía primaria de Gillies Hall es de 131 kWh/m²a y la frecuencia de cambio de aire n50, de 0,5.

La residencia de estudiantes ofrece 150 apartamentos individuales, dos viviendas tuteladas y zonas comunes para los cerca de 250 estudiantes que viven en el campus. Los tonos cálidos e intensos de la paredes y los techos de tablas encoladas confieren una nota característica a la atmósfera interior del edificio y convierten a Gillies Hall en un acogedor hogar temporal. 

Esta construcción de madera maciza erigida sobre un zócalo de hormigón se construyó en tan solo once semanas. En las cinco plantas superiores se ha dispuesto un llamativo revestimiento exterior compuesto por láminas de chapa verticales de color cobrizo. Delante de las ventanas, las láminas están colocadas en un ángulo de 90 grados y, de este modo, proyectan un juego animado de sombras en la envolvente del edificio.

Para alcanzar el estándar Passivhaus es de vital importancia seleccionar el acristalamiento adecuado. En la residencia de estudiantes se han instalado más de 1000 m² de vidrio aislante de Saint-Gobain Glassolutions. 

Con el fin de eliminar con eficacia los puentes térmicos en el borde del cristal, se ha utilizado el perfil intercalario de borde caliente SWISSPACER ULTIMATE con certificación Passivhaus. Este perfil de altas prestaciones cuenta con una lámina estanca al vapor de agua y al gas, de manera que también evita que el relleno gaseoso se escape de la cámara y que el vapor de agua penetre en el interior durante toda la vida útil de la ventana. Esto garantiza la función de aislamiento térmico del vidrio aislante y, por ende, del edificio, de forma permanente.

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